El Juzgado Primero Penal del Circuito de Ibagué condenó al exalcalde Luis Hernando Rodríguez Ramírez a 3 años y 8 meses de prisión, luego de avalar el preacuerdo suscrito con la Fiscalía General de la Nación por el delito de interés indebido en la celebración de contratos.

La sentencia está relacionada con el contrato de interventoría del estadio Manuel Murillo Toro, suscrito en el marco de los Juegos Nacionales y Paranacionales 2015, evento que en su administración prometió ser un impulso para el deporte, pero terminó convertido en uno de los mayores escándalos de corrupción de la ciudad.

De acuerdo con las investigaciones, Rodríguez Ramírez —quien fue alcalde entre 2012 y 2015— delegó funciones de contratación a terceros que, a cambio de coimas, direccionaron los contratos a determinados oferentes, sobreponiendo intereses particulares y económicos. Como resultado, quedaron obras inconclusas y escenarios deportivos fantasmas que nunca cumplieron su propósito.

La Fiscalía 81 Especializada Gaula estableció que el exmandatario tuvo responsabilidad directa en al menos tres frentes:

• Piscinas Olímpicas (Contrato 074 de 2015): peculado a favor de terceros, contratos amañados y violación de requisitos legales.

• Diseños del estadio Manuel Murillo Toro: peculado, contratación irregular y omisión de la ley.

• Contrato con Orlando Arciniegas Lagos: interés indebido en la celebración de contratos.

Esta es la tercera condena que recibe Rodríguez Ramírez por las irregularidades en la contratación de los Juegos Nacionales. Actualmente cumple prisión domiciliaria por una de las sentencias anteriores.

Además de la pena privativa de la libertad, el juzgado le impuso 56 meses de inhabilidad para ejercer derechos y funciones públicas y una multa de 133,32 salarios mínimos legales mensuales vigentes.

El próximo 11 de diciembre se llevará a cabo la audiencia de lectura oficial de la condena, en la que el juez determinará la dosificación final de los cargos y los beneficios aplicables, lo que podría ampliar el tiempo de reclusión, teniendo en cuenta que la normatividad establece penas de entre 4 y 15 años de prisión por cada conducta, con la posibilidad de sumar hasta 25 años de cárcel.

Con este nuevo fallo, se refuerza la responsabilidad de Rodríguez en una de las páginas más oscuras de la historia reciente de Ibagué: los Juegos que prometieron gloria y progreso, pero terminaron dejando ruinas, frustración y corrupción para el deporte tolimense y nacional.