Un operativo de control penitenciario puso bajo la lupa el manejo de los centros de reclusión especiales en Colombia. Este miércoles, 3 de septiembre, la Policía Nacional decomisó tres teléfonos móviles y un cargador en la Escuela de Carabineros, en Bogotá, lugar donde permanecen detenidas la influenciadora Daneidy Barrera, conocida como Epa Colombia, y la exasesora presidencial Sandra Ortiz.

La inspección sorpresa se realizó tras recibir reportes sobre llamadas y comunicaciones no autorizadas desde las instalaciones. Entre los dispositivos incautados, uno pertenecía a la creadora de contenido, mientras se investiga a quiénes pertenecían los demás equipos y cómo ingresaron al centro de reclusión.

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Este hecho genera especial atención debido a que en la Escuela de Carabineros permanecen procesadas figuras públicas vinculadas a casos de alto impacto, como el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo (UNGRD). Para las autoridades, este hallazgo refleja fallas estructurales en el control penitenciario y pone en debate la seguridad de los espacios destinados a personajes de alto perfil político y social.