Ecos de la derrota en Melgar: ¿El barretismo perderá la tercera curul azul a la Cámara?
La derrota en las elecciones atípicas de Melgar no solo significó la llegada de Francisco Antonio Bermúdez a la alcaldía, sino también un duro golpe para Alejandro Martínez, representante a la Cámara y uno de los aliados del barretismo en el Tolima.
Martínez perdió en su propio terreno, donde durante años consolidó poder gracias al control burocrático y al manejo de la política local.
Su apuesta personal por imponer una candidata que estaría inhabilitada como Yolanda Pérez terminó en fracaso, con un desgaste de recursos y credibilidad que lo deja debilitado de cara al 2026.
El efecto político es inmediato: el barretismo confiaba en que Martínez mantuviera el fortín de Melgar como una base segura de votos, especialmente pensando en sostener la tercera curul azul en la Cámara de Representantes.
Sin embargo, el revés deja en evidencia que dicha curul nunca ha sido realmente del barretismo, sino del ‘Gomezgallismo’, y que su permanencia dependerá de las decisiones de José Elver Hernández, “Choco”, y de su integración o no en la próxima lista.
La derrota en Melgar se convierte, además, en la segunda atípica que el barretismo pierde en el Tolima, lo que alimenta la percepción de desgaste y errores estratégicos.
Según fuentes consultadas, Óscar Barreto se distanció del proceso electoral y limitó su participación a gestos mínimos de acompañamiento, una apuesta que terminó pasándole factura.
Hoy, el panorama para Alejandro Martínez es incierto: debilitado en su bastión y con dudas sobre su futuro inmediato.
Aunque aún cuenta con el respaldo del barretismo para el Senado de Santiago Barreto, su margen de maniobra es cada vez menor.
La gran incógnita que queda tras la derrota es clara: ¿podrá el barretismo sostener una tercera curul que nunca le perteneció del todo o esta vez el remezón en Melgar será suficiente para reconfigurar la representación azul en el Congreso?