Una creciente súbita del río Gualí, que nace en el Nevado del Ruiz, encendió las alarmas en Honda, Tolima, este fin de semana.

La emergencia llevó al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo a declarar Alerta Roja en todo el municipio, como medida preventiva para salvaguardar la vida de los habitantes.

El comandante del Cuerpo de Bomberos de Honda, César Santana, confirmó que la situación fue crítica en la madrugada del sábado, especialmente en el barrio Las Delicias, donde el agua ingresó a los patios de varias viviendas.

“El río Gualí presentó una creciente súbita de gran magnitud que no se veía hace más de 15 años”, explicó.

Según Santana, los organismos de socorro evacuaron a parte de la comunidad, aunque algunos residentes decidieron permanecer en sus casas.

La situación más preocupante se registró en el ingreso al barrio, donde un enorme socavón de más de dos metros y medio de profundidad amenaza con colapsar la vía.

El socavón se formó al lado izquierdo del ingreso, a pesar de que el río corre por el lado derecho.

“Ahí va a colapsar la vía, la vía colapsa porque se va agrandando cada día, y para intervenir hay que esperar a que el nivel del río baje, pero con estas lluvias es muy difícil”, alertó Santana.

Pero el Gualí no fue el único río en desbordarse. Su “río hermano”, el Guarinó, que divide al Tolima con Caldas, también presentó una creciente súbita y está a punto de destruir otro muro de contención en la vereda Perico, cerca de su desembocadura en el Magdalena. Las viviendas más cercanas, ubicadas en zonas de alto riesgo e incluso de invasión, están en peligro inminente.

El comandante de Bomberos destacó que su equipo fue el primero en llegar a las zonas afectadas.

Posteriormente, se logró articular presencia institucional con el alcalde y el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo para tomar decisiones.

La alerta roja permanecerá activa mientras continúe el riesgo por lluvias y crecientes.