Ante la posibilidad de que se extienda el toque de queda nocturno decretado por la Alcaldía de Ibagué a raíz del incremento de los casos confirmados de coronavirus, el concejal Eduard Toro manifestó su rechazo al considerar que se trata de “una medida gelatinosa”.

Según el cabildante del Centro Democrático, si bien apoya las decisiones tomadas por los gobernantes para salvaguardar vidas en medio de la pandemia, la orden de confinamiento absoluto durante las noches hasta el mes de enero no genera el impacto esperado en esta capital.

“Me dan a entender que el coronavirus duerme de día y sale de noche”, afirmó Toro, quien además se refirió a las permanentes aglomeraciones registradas en el centro de la ciudad y en las plazas de mercado sin que al parecer exista mayor control por parte de las autoridades.

Por último, generó una voz de alerta al asegurar que “muchos establecimientos no están tomando las medidas” dispuestas por la Secretaría de Salud Municipal, y advirtió que de continuar ese panorama, los ibaguereños tendrían que prepararse para afrontar un enero “desastroso” principalmente para el comercio.