“El que nos tiene que responder por el agua es el alcalde y no el Ibal”: José Martínez
Un ibaguereño de los barrios del sur decidió encadenarse a los tubos con que el Ibal pretende bajar el agua del acueducto complementario para volverla a subir posteriormente para los barrios del sur, en protesta por el inconformismo que tienen frente al proyecto.
“Nos viven diciendo mentiras diciendo que van a llevar el agua al Ibal y no la vuelven a traer en el 2023, nos citaron a unas mesas para dialogar y prácticamente nos llamaron a ‘mamarnos gallo’ porque la plata para devolver el agua al sur nunca está, ni siquiera hay planificación ni planos”.
El señor José Martínez comentó que a los barrios del sur les corresponden 400 litros por segundo según la planificación inicial del acueducto complementario.
“Llevamos 2 meses y nos paramos de las mesas porque no hay ninguna propuesta que le sirva al sur, resolví encadenarme y vamos a parar la obra hasta que el señor alcalde se siente a hablar con nosotros, no tenemos que dialogar con el IBAL porque éste es solo el prestador del servicio, la competencia de los acueductos comunitarios que entre otras cosas los quieren acabar”.
El ciudadano le exigió al alcalde Guillermo Jaramillo que les demuestre con proyectos y recursos cómo es que el agua regresará a los barrios del sur, lo cual la comunidad duda mucho.
“Esta obra va a tener que tener reversa, hay otra problemática, soy beneficiario de los apartamentos de El Tejar que siempre ha tenido un problema con el agua que dice la Alcaldía que ya solucionó pero lo que realmente pasa es que Boquerón nos llena un tanque y le damos agua por raticos a los habitantes del multifamiliar, es otra mentira que el alcalde le está metiendo a la ciudadanía”, afirmó José Martínez.
El ciudadano aseveró que destinaron 3.448 millones para un acueducto con dos adicionales a dedo en la administración pasada, el cual no sirve de mucho y está en proceso de investigación por parte de la Fiscalía por lo que no hay ninguna seguridad en cuanto al agua.
“Todos los acueductos del sur necesitan agua cruda para satisfacer la demanda de más de 100 mil ibaguereños que habitan el sur. La relación con el Ibal está muy deteriorada porque es solo un prestador de servicio y no entendemos porque el alcalde insiste en mandarnos a hablar con ellos, cuando el que nos tiene que responder por el agua que nos pertenece es el municipio”.