Colombia se ubica en el grupo de los países con participación salarial intermedia
De acuerdo a los estudios adelantados por la Organización Internacional del Trabajo, OIT, este año, es alarmante la pérdida de peso de los salarios en la productividad de los países, a lo cual se debe resaltar que una de las variables para calificar la calidad de vida de las personas es a través de los ingresos que reciben generando así un comportamiento en el mercado laboral y el nivel de la informalidad.
A pesar de que Colombia ha venido acrecentando la productividad, su participación promedio de los salarios en el PIB ha demuestra que este ha disminuido, situación que no pasa con China y Estado Unidos, debido a que su participación salarial se ha incrementado, así como la participación de la renta del trabajo, respectivamente; mientras que países como México y Portugal son algunos delos más bajos con una tendencia una tendencia descendente.
Es así como Colombia por su participación salarial media se encuentra en este grupo que tiene ese mismo nombre, al lado de países como Bolivia, México, Paraguay y Venezuela.
En el grupo de los promedios más bajos están Ecuador, El Salvador y el Perú; mientras que los más altos en esta participación corresponden a Panamá, Costa Rica, Honduras, el Brasil, la Argentina, el Uruguay y Chile.
Para contextualizar un poco lo que pasa en Colombia, debemos decir que para el año 2008 como lo refleja la siguiente gráfica, en el 2008 la participación salaria fue de 31.67%, una de las más bajas.
Como dato se debe resaltar que para el año 1993 se presentó la mayor participación con 44.07%, con una diferencia de 12,4 puntos por encima del 2008.
Propuesta del Banco de la República
El anterior análisis permite pensar que existen empleos creados presentan bajos niveles de percepción salarial, por ello el Banco de la República está intentando trabajar en la propuesta de salarios diferenciales, es decir por regiones, para representar un avance en el entorno a la informalidad laboral y la movilidad en la mano de obra en el territorio colombiano.
En este sentido La OIT como organismo especializado de las Naciones Unidas que se ocupa de los asuntos relativos al trabajo y las relaciones laborales, propone que se puede hacer de esa manera, salario diferencial, por la productividad laboral en las regiones, y agregó que se debe presentar un aumento mesurado, ya que con esto se mitigaría la desigualdad de las actividades.
Es de recordar que en Colombia el 62% de los trabajadores y/o empleadores tienen labores basados en la informalidad.
Hasta la fecha, han salido contradictores y apoyos a la propuesta del Banco de la República publicada como borrador el17 de octubre de 2017, registrada con el número 1023 bajo el nombre de: Informalidad laboral y elementos para un salario mínimo diferencial por regiones en Colombia, precisando que se deben tener más estudios para saber su viabilidad ya que hay zonas del país que están más atrasadas y eso indica que el salario va hacer muy reducido, lo que podría llevar a una desigualdad más grande de la que ya existe.
Otras reflexiones como el de Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGT) no la estima conveniente: “Es absolutamente inaceptable, eso es 'balcanizar' el salario. Lo que la CGT plantea es que el único Departamento en donde debe existir un salario diferencial es en San Andrés y Providencia, cuyos productos son importados y por eso su costo es mayor. No es justo que la isla tenga un salario igual al resto del país”.
¿Qué se dice de Ibagué?
De acuerdo al análisis del economista, Edwin Andrés Martínez, puede que se presenten problemas para las ciudades donde existe una informalidad más alta, para el caso de Ibagué dijo que en la práctica ya hay muchos trabajadores que devengan un suelo por debajo del salario estipulado por ley, y si se crean estos salarios diferenciales ayudaría alimentar la migración de trabajadores a otras ciudades que ofrezcan mejores salarios.
“La creación de salarios mínimos diferenciales podría alimentar aún más la fuga de personas en búsqueda de mejores salarios en las ciudades donde los niveles de productividad son más altos, esto para el caso no solo de trabajadores con menor calificación, sino incluso para aquellos trabajadores con niveles de calificación más elevados, pues una reducción en el salario mínimo puede tener un impacto hacia abajo en el nivel general de salarios, afectando con ello las posibilidades de que las regiones más atrasadas puedan avanzar en términos de obtener mayores niveles de productividad en el futuro”. Con Información del boletín: Salario mínimo diferencial por regiones y su impacto en la calidad de vida.