Encuestas, conciliábulos y volteretas políticas
Por estos días las encuestas o sondeos que hacen diferentes firmas consultoras en alianza con medios de comunicación van mostrando la favorabilidad de los candidatos a gobernación y alcaldía en todo el país, especialmente en las principales ciudades capitales.Estos primeros termómetros electorales permiten anticipar como podría ser los resultados el próximo 29 de octubre; sin embargo, en estos 50 días que faltan para las elecciones, se pueden presentar giros inesperados de 180 grados, pudiendo cambiar los escenarios, a tal punto de que podrá haber enormessorpresas electorales en las diferentes regiones del país.
No cabe la menor duda que en las entrañas del mundo político existen o se crean conciliábulos en los que se entretejen estrategias y alianzas de todo tipo con tal mantener el poder o al menos para estar vigentes en los círculos políticos. Los candidatos que no tiene opción alguna de salir victoriosos, a sabiendas de que no gozan de favorabilidad, votos reales, estructura política o recursos económicos, seguramente preferirán declinar su aspiración logrando una buena alianza antes que una dolorosa y costosa quemada. Muchos candidatos a pesar de saber que no tienen opción alguna seguirán hasta el final en procura de construir procesos políticos de largo aliento, donde lo importante se basa en ganar espacios reales de liderazgo e incluso de oposición. Otros seguramente venderán su alma prefiriendo un acuerdo político para garantizar algún beneficio a futuro, alianza o una tajada del pastel.
Como bien lo dirían algunos analistas expertos en la materia: “En política nada es como parece”, todo se mueve, todo se reacomoda, todo cambia; no importa el color o la ideología, la política es como el camaleón “Dinámica y Cambiante”. En este sentido queda advertido que cualquier cosa pude pasar. En el mundo de la política no hay amigos ni sentimientos, solo haysed de poder e intereses de por medio. A pesar de esto aún quedan verdaderos lideres políticos que saben y conocen el concepto de lealtad, esos que si se preocupan por el desarrollo de sus territorios y que han logrado mejorar las condiciones de vida de sus pueblos, esos que ayer, hoy, mañana y siempre serán premiados una y otra vez por esos electores que reconocen el valor de la verdad y la lealtad de manera permanente, no como en otros casos donde cada cuatro años aparecen los mercaderes de la política, esos que simplemente transitan por el oscuro camino de la politiquería reapareciendo solo en los momentos electorales.
Para nadie es un secreto que hoy por hoy la actividad política está desprestigiada y mal vista por la mayoría de los ciudadanos, por lo que muchos se abstienen de votar, el gran problema es que quienes no votan no eligen y quienes no eligen si o si serán gobernados por quien tenga el voto de las mayorías. Votar es un derecho y un deber ciudadano, no votar es permitir que otros elijan por usted.
Lamentablemente la política se ha desdibujado en Colombia, un escenario de la democracia permeado por falsas ideologías, promesas y engaños. Los ciudadanos ya no tragamos entero, hoy los electores estamos más que ilustrados, hemos aprendido la lección de manera didáctica a través de la mejor metodología “prueba y error”. Los colombianos ya entendimos que no podemos elegir demagogos ni populistas que históricamente solo se quedaron en falsas promesas, pero de obras, desarrollo y progreso, nada.
Así las encuestas digan una cosa dos meses antes de las elecciones, no significa que esa sea la últimapalabra, aún falta la parte más dura de la competencia, lo más duro y complejo de estos procesos electorales está por venir, 50 días para que la democracia nos permita conocer quiénes serán los nuevos gobernadores, alcaldes, diputados y concejales. Lo más importante es votar por convicción, votar programáticamente por las mejores propuestas y los mejores candidatos. Conozca a los candidatos y este atento a sus propuestas, es parte de la responsabilidad y deber como ciudadanos. Participe, no permita que otros elijan por usted.