¡Por favor ministra, renuncie!
El Gobierno del presidente Petro inició hace 5 meses y desde entonces, son muchos los anuncios de cambio que se han hecho sobre diversos ámbitos del país; no obstante, el que mas especulación ha tenido y mayores consecuencias ha ocasionado, es la intención de frenar las exploraciones de gas y petroleo.
La ministra de Minas y Energía desde que tomó posesión de su cargo, ha navegado en un mar de contradicciones, inconsistencias y desconocimiento de la cartera que maneja, por lo que en buena parte se le atribuye el alza del dolar y la baja cotización del petróleo colombiano en la bolsa.
Ahora bien, sus desatinadas declaraciones llegaron al Foro Económico Mundial llevado acabo en Davos Suiza, donde notificó que era una decisión del Gobierno Petro: “no conceder mas contratos de exploración de gas y Petróleo”, sustentando su afirmación en un documento oficial emitido por su Ministerio titulado: “Balance de contratos de hidrocarburos y recursos disponibles para la transición energética justa” en el que asegura, que Colombia cuenta con recursos energéticos hasta el 2037 e incluso hasta el 2042.
Entonces, mas allá de que altos funcionarios del Ministerio de Minas como la viceministra de Energía y el director de Hidrocarburos no conocieron los detalles del reporte antes de ser publicado y fueron incluidos como unos sus autores; expertos han puesto de presente serios vacíos técnicos en el documento que generan graves preocupaciones, pues solo el petróleo representa el 40% de lo que como país le vendemos al mundo. Es decir, que sin petroleo, nuestra economía se contraería un 3.3%.
Para hacer la historia corta, las reservas probadas de hidrocarburos deben tener tres requisitos: 1. Que esté el hidrocarburo, 2. Que exista la tecnología para extraerlo y producirlo y 3. Que él producto sea económicamente rentable. Lo que hizo nuestra flamante Ministra, fue mezclar las reservas probadas con un montón de expectativas y proyectos que aún no tienen ningún tipo de viabilidad, algo muy folclórico, por cuanto las reservas del país que cumplen con los tres requisitos mencionados con anterioridad, son a hoy, de 8 años.
Es una total irresponsabilidad basar un renglón vital para la economía colombiana en simples probabilidades o perspectivas, sin tener en cuenta el impacto económico, fiscal, financiero, social y cultural que eso acarrea, tan solo por querer imponer una ideología que no tiene una base sólida ni un plan definido. Es cierto que el deber ser en el futuro sea que partamos hacia una transición de energías limpias pero con una estrategia que permita una sustitución paulatina y segura. Ni los países desarrollados, que cuentan con recursos muy superiores a los nuestros han logrado hacerlo, mucho menos nosotros con una lider del proceso que no tiene idea de lo que está haciendo. ¡Por favor Ministra, renuncie!