Gerente de la EDAT responde a denuncia del senador Ariel Ávila sobre "elefante blanco" de $11.000 millones

Luego de que el senador Ariel Ávila calificara como un “elefante blanco” el acueducto de Armero Guayabal y señalara presuntas irregularidades en la ejecución del contrato por $11.000 millones, el gerente de la EDAT, Rodrigo Herrera, salió al paso para defender la obra y aclarar los cuestionamientos.
El funcionario pidió separar lo técnico de lo político y sostuvo que el sistema sí funciona,
“Hoy en día el municipio usa el tubo nuevo y también el anterior, y más o menos llegan entre 60 y 70 litros por segundo, que son los que se tratan y se entregan a la población”, explicó.
Aunque reconoció que hay sectores con intermitencia, aseguró que esto obedece a problemas de consumo excesivo, pérdidas comerciales y falta de micro medición, no a fallas estructurales de la obra.

Según Herrera, el proyecto fue diseñado para abastecer el municipio hasta el año 2049, con una capacidad de 45 litros por segundo, según la normativa vigente.
En cuanto al prolongado plazo de ejecución —que pasó de 10 meses a casi tres años, con cuatro prórrogas y dos suspensiones—, Herrera aseguró que eso se debió a factores ajenos al contratista, como conflictos por el paso de las redes, condiciones geográficas difíciles y trámites con comunidades.
“Es bien difícil uno cumplir con los plazos de ejecución, porque empiezan problemas con los permisos, con los predios, y el terreno donde se construyó es agreste”, explicó.

Sobre la crítica por no hacer efectiva la póliza de cumplimiento, el gerente fue claro: “Para yo hacer efectiva una póliza porque algo quedó mal, es porque yo tenga un concepto técnico que me diga que la obra quedó mal”.
Según explicó, contrató una entidad experta en peritajes para evaluar técnicamente la obra, pero hasta ahora no se ha emitido un dictamen que sustente el incumplimiento.
Finalmente, Herrera subrayó que la discusión se ha desviado al confundir problemas de operación actuales con el resultado del contrato.
“Una cosa es la obra, y otra el suministro regular afectado hoy por el alto consumo, el desperdicio y los fraudes”, concluyó.