Pocas veces la frase “el éxito tiene muchos padres, pero el fracaso es huérfano” resulta tan precisa como para describir lo que hoy ocurre con las fallas en el Coliseo Menor de Ibagué.

Apenas se conoció que el Coliseo de Gimnasia —cuya inauguración se realizó en abril— presentaba infiltraciones de agua, comenzaron a circular señalamientos en redes sociales y portales informativos sobre quién sería el responsable.

Entre los señalados, algunos apuntaron directamente a los estudios y diseños entregados por la Alcaldía de Andrés Hurtado, insinuando que estos serían la causa raíz del problema.

Ante ello, en una mesa técnica realizada este martes, la contratista Melissa Pacheco fue enfática al señalar que no se deben sacar conclusiones apresuradas.

“Eso está bajo estudio y evaluación. Sería muy apresurado indicar que tiene que ver con algo de los estudios y diseños”, afirmó.

Pacheco informó que su equipo se encuentra adelantando nuevas evaluaciones técnicas para identificar con precisión la causa de las infiltraciones y poder plantear soluciones efectivas.

“Que no se sigan generando más pasquines y situaciones en torno a la desinformación que se ha generado con este tema”, dijo.

Por su parte, la secretaria de Infraestructura del Tolima, Sandra García, también defendió la entrega del escenario, explicando que las filtraciones no fueron evidentes antes de abril.

En ese sentido, García insistió en que no hubo una entrega apresurada del coliseo:

Tanto el contratista como la Gobernación del Tolima aseguraron que ya están en marcha las acciones necesarias para corregir la situación y garantizar el uso pleno del escenario por parte de los deportistas.