Un joven de 24 años terminó con su vida lanzándose a las llantas de una buseta
En el inicio de la novena de aguinaldos un joven decidió partir para el mas allá al parecer por problemas de índole emocional y afectivo.
Este caso de suicidio se registro frente al estadio Manuel Murillo Toro, a pocos metros del CAI del barrio departamental, en la calle 36 con carrera cuarta.
El joven identificado como Jairo Alexander Rincón Lozano, de 24 años decidió se lanzarse al paso de la buseta afiliada a la empresa Cotrautol, de numero interno 2733 y de placa WTO-005, el automotor cubría la ruta 35 que lleva por este carreteable al sector de Picaleña
El joven falleció de manera inmediata cuando fue arrollado por las llantas del automotor.
Rincón Lozano, laboraba en el centro de la ciudad en el local denominado Max Jean en el sector de la calle 15.
Carmenza Lozano, madre de Jairo Alexander labora en el Centro Comercial Yulima, como guarda de seguridad, gracias a su vasta experiencia cuando perteneció a la Policía Nacional.
Carmenza Lozano, presintió que algo malo le había pasado a su hijo, el cual no llego en la noche a su residencia a dormir y quien al parecer habría pasado la noche recorriendo diferentes bares en compañía de otro sujeto del cual se desconoce su identidad.
Este presentimiento se hizo realidad cuando una llamada la alerto de la presencia de su hijo en el asfalto de la carrera cuarta con calle 36.
En medio de sollozos Carmenza reconoció a su retoño pese a encontrarse desfigurado y con exposición de masa encefálica.
Las autoridades iniciaron las respectivas investigaciones para dar con el paradero del extraño que acompaño a Jairo Alexander en sus últimos momentos en vida y así poder esclarecer la verdad de esta fatal decisión.
Fuentes cercanas indicaron a Eco Noticias que el hoy occiso habría salido a tomar unos tragos a un establecimiento público del centro de Ibagué, en compañía de un hombre del cual no saben su identidad y no regresó a dormir a su residencia. Hoy una llamada alertó a su progenitora, quien en medio del llanto llegó al lugar para el respectivo reconocimiento del cuerpo, quien yacía sobre la vía con desfiguración y exposición de masa encefálica.