Comunicado Colectivo de Mujeres del Tolima en contra los actos recientes de Feminicidio
Expresamos gran preocupación por los feminicidios cometidos en contra de las mujeres ibaguereñas, pues en lo corrido del año 2017, se han evidenciado cinco casos más en la ciudad. Del mismo modo, nos indigna la agresión de la cual fue víctima la periodista María Fernanda Díaz, en el municipio de El Espinal, por parte de su pareja el concejal Fabián Moreno Cartagena, esto sin contar las múltiples denuncias que no llegan a salir a la luz pública. Reiteramos que los feminicidios representan la forma más extrema de vulneración de los derechos de una mujer, al punto de causarle la muerte. Este grave delito es tipificado de manera específica en la legislación colombiana a través de la Ley 1761,conocida también como "Rosa Elvira Cely" de 2015.
¿Hasta cuándo? Las organizaciones de mujeres levantamos nuestra voz a causa de este tipo de violencia y en tal sentido, exigimos que las autoridades competentes y la sociedad civil desarrollen acciones decididas y sistemáticas para prevenir que se repitan estos graves hechos. La violencia contra las mujeres y los feminicidios son inaceptables, se pueden evitar y se deben prevenir mejorando las rutas de atención a las mujeres violentadas, y acelerando tanto el proceso de la denuncia, como el cumplimiento de la Ley 1257 de 2008, sobre no violencias contra las mujeres.
Los feminicidios, así como cualquier forma de violencia contra las mujeres, constituyen una grave violación de sus derechos humanos, un atentado contra su dignidad e integridad, y una vulneración flagrante de su derecho a una vida
libre de violencias, lo que limita la garantía del conjunto de sus derechos fundamentales. Igualmente, recordar que el feminicidio y la violencia sexual afectan a miles de mujeres en Colombia, quienes hasta el día de hoy han sido víctimas de estos graves delitos y siguen enfrentando fuertes barreras para acceder a la justicia, sin poder lograr una respuesta rápida, efectiva, un trato diferenciado, ni las mínimas garantías de sus derechos por parte del sistema de justicia colombiano.
El caso de Yeimy Valderrama Salvador y los múltiples feminicidios acontecidos en el territorio nacional: son consecuencia de la permisividad social respecto a la violencia contra las mujeres, demuestran que falta una intervención oportuna por parte de las instituciones para protegerlas, para detener de una vez por todas este flagelo y ensombrecen los avances de la sociedad colombiana, con relación a la equidad de género e impiden transformar las condiciones culturales que generan la problemática enunciada.
Por estas razones, nos unimos al llamado que realizan las diversas organizaciones como ONU Mujeres y ONU Derechos Humanos: recordar que todo homicidio de mujeres motivado por razones de género o discriminación
hacia las mujeres, es un feminicidio, y que en Colombia, se evidencia un fenómeno de violencia en contra de la mujer de tipo estructural y sistemático, que se puede presentar en cualquier contexto, incluido el íntimo de la familia, el ámbito de la pareja, el medio laboral o cualquier espacio de la vida cotidiana de una mujer. Todas estas formas de violencia contra las mujeres basadas en el género, surgen de la desigualdad en las relaciones entre hombres y mujeres, de estructuras de poder y control social de tipo patriarcal, que sitúan a las mujeres como subordinadas y en vulnerabilidad a la violencia. Reivindicamos que ningún feminicidio puede quedar en la impunidad.
CASA DE LA MUJER, OYE MUJER, FUNDACIÓN MENCOLDES, FUNDACIÓN YAPAWAYRA, RED DE MUJERES DE IBAGUÉ, CORPORACIÓN SURCOS, COLECTIVO INTERDISCIPLINARIO DE ESTUDIOS DE GÉNERO DE LA UNIVERSIDAD DEL TOLIMA, COLECTIVO CONGÉNERE, CEMUJER, COLECTIVO DULIMA VIVE, COLECTIVO DE MUJERES VÍCTIMAS DEL CONFLICTO ARMADO, COMITÉ DE SOLIDARIDAD CON LOS PRESOS POLÍTICOS, MUJERES DIVERSAS QUE INDIVIDUALMENTE SE HAN SUMADO A ESTE PROCESO.