Tras los atentados ocurridos en Cali y Amalfi (Antioquia), que dejaron 18 personas muertas y más de 65 heridas, la gobernadora del Tolima, Adriana Matiz, se pronunció con firmeza responsabilizando al Gobierno Nacional por lo que calificó como un debilitamiento de las capacidades de la Fuerza Pública.

Según la mandataria, la violencia que hoy golpea a Colombia es consecuencia de decisiones equivocadas que han puesto en riesgo la vida de los ciudadanos:

“Estos sucesos que estamos viviendo durante los últimos días se deben a las malas decisiones políticas, malas decisiones políticas que han llevado a que se decapite la operatividad y también la inteligencia de nuestra fuerza pública. Y esto nos está costando hoy la vida de los colombianos”, expresó.

Matiz hizo un llamado urgente al Ejecutivo para reforzar la seguridad y enfrentar a los responsables de los recientes ataques:

“El llamado es en especial al Gobierno Nacional para que se tomen las medidas pertinentes de fortalecer a nuestra fuerza pública y poder combatir a todos estos delincuentes, terroristas y narcotraficantes”, enfatizó.

La gobernadora también subrayó que la amenaza ya no puede clasificarse bajo las figuras tradicionales de guerrilla o paramilitarismo, sino como un fenómeno más amplio de terrorismo y criminalidad:

“Aquí ya no se habla de guerrilleros o paramilitares; lo que tenemos son terroristas, narcotraficantes y delincuencia común que están azotando a nuestro país”, recalcó.

Finalmente, Matiz manifestó su respaldo a la Fuerza Pública y reconoció la labor de policías y militares que, pese a las dificultades, continúan garantizando la seguridad en los territorios.

“Toda nuestra solidaridad con nuestra Fuerza Pública: aquí hay colombianos que los respaldamos, los queremos y reconocemos su labor”, concluyó.