Un grave caso de agresión se presentó en la comuna 7 de Ibagué, en medio de un conflicto ambiental que ya venía siendo advertido por la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima. La víctima fue Julio César Betancourt, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Ambiricaima, quien terminó hospitalizado tras ser atacado por un ciudadano señalado de adelantar obras ilegales en la quebrada Chembe.

De acuerdo con información oficial, el presunto agresor es Carlos Andrés Delgado Lozano, a quien Cortolima le abrió el proceso sancionatorio ambiental SAN-1-22412-20250220 por varias infracciones ambientales graves, entre ellas:

• Disposición inadecuada de material sobre el talud de encauzamiento de la quebrada Chembe.
• Ocupación ilegal del cauce mediante muros de gaviones sin autorización.
• Afectación a trece árboles de especies nativas como guamo, arrayán, caucho y cachimbo.

Pese a que la autoridad ambiental le ordenó cesar toda actividad en la zona protectora, el pasado 16, 17 y 18 de julio se evidenció la presencia de maquinaria amarilla trabajando sobre la fuente hídrica. Estas intervenciones, según se denunció, estarían siendo justificadas de forma irregular con un acta del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo que no autoriza intervenciones en el sector de Ambiricaima.

Fue en medio de ese contexto que Betancourt, al confrontar a Delgado Lozano y documentar la intervención, fue agredido física y verbalmente. Las lesiones le generaron fracturas que obligaron a una cirugía de urgencia. La familia del líder comunal y vecinos del sector ya interpusieron denuncias penales ante la Fiscalía General de la Nación.

Mientras tanto, la comunidad denuncia que las obras ilegales continúan avanzando sin control, en una zona ambientalmente sensible, y ahora bajo un nuevo agravante: la violencia contra quienes intentan defender el entorno natural de Ibagué.

“No podemos permitir que la violencia silencie a quienes cuidan lo que nos da vida”, sentenció uno de los vecinos afectados.