Los recientes anuncios de la Dirección de Espacio Público de Ibagué, que incluyen operativos de control en el sector de La Arboleda Campestre, han encendido las alarmas entre los emprendedores informales que trabajan en la zona. La intervención, que busca recuperar espacios públicos ocupados por ventas ambulantes, ha dejado a varias familias con incertidumbre sobre su futuro económico.

Uno de los testimonios que refleja el impacto de esta decisión es el de una mujer que, junto a su esposo, emprendió recientemente un negocio de comida rápida. “Estamos pasando por un momento difícil con nuestro emprendimiento, lo abrimos hace poco y aún no hemos logrado recuperar la inversión. Nos sentimos desanimados porque no vemos avances y ahora, con este anuncio, todo se complica más”, relató.

Según explicó, han intentado posicionarse en el sector con esfuerzo y dedicación, pero factores como la baja en las ventas, la presión de los proveedores y el contexto económico adverso les han dificultado el camino. “Nuestros proveedores nos están presionando para que paguemos, pero no tenemos opciones claras. La economía en Ibagué está muy complicada y ahora nos quieren quitar el único lugar donde medio trabajamos”, lamentó.

Desde Espacio Público, el director Rodolfo López ha manifestado que la intervención responde a múltiples denuncias de residentes del sector que se quejan por la ocupación de andenes y vías. No obstante, los trabajadores informales afirman que sienten que no hay un canal de diálogo real ni alternativas viables para continuar con sus negocios de forma legal.

Mientras se preparan los operativos, los emprendedores de La Arboleda Campestre solo tienen preguntas: ¿dónde podrán continuar trabajando?, ¿cómo responderán a sus obligaciones económicas?, y, sobre todo, ¿quién los escucha en medio de la crisis?