Un nuevo motín se registra desde esta mañana en el centro de resocialización para adolescentes ubicado en la calle 44 con carrera Sexta, en la ciudad de Ibagué. Varios menores infractores, que permanecen bajo custodia judicial, iniciaron disturbios en un aparente intento de fuga masiva, generando alarma entre los vecinos del sector y preocupación por las condiciones de seguridad al interior del centro, conocido popularmente como la correccional de Ibagué.

Según versiones preliminares, los adolescentes habrían protagonizado desórdenes dentro de las instalaciones, desafiando la autoridad de los cuidadores y generando momentos de tensión con intentos de evasión. A pesar de la reacción inmediata de las autoridades, la situación refleja un patrón que se ha repetido en las últimas semanas.

De hecho, hace menos de ocho días se reportó otro incidente de similares características, en el que los menores lograron romper candados, acceder a los techos de la estructura y amenazaron con escapar. En aquella ocasión, la intervención de la Policía de Infancia y Adolescencia evitó la fuga, pero dejó en evidencia la falta de control interno y la creciente crisis de gobernabilidad dentro del centro.

Hasta el momento, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), entidad encargada del seguimiento a los procesos de resocialización de los adolescentes sancionados por la ley, no ha emitido ningún pronunciamiento oficial sobre los hechos.

La situación es aún más crítica si se tiene en cuenta que muchos de los jóvenes que se encuentran en este centro enfrentan medidas por delitos de alto impacto como homicidio, porte ilegal de armas, tráfico de estupefacientes, lesiones personales y hurto. El descontrol interno no solo compromete la integridad de los menores y del personal, sino que también representa un riesgo para la seguridad pública, en caso de que se materialicen los intentos de fuga.

En este momento, la situación en el centro es de tensa calma. Varios uniformados permanecen en el lugar, mientras los internos continúan mostrando señales de desobediencia y resistencia.