Última Hora: salen a la luz las fallas que llevaron a la intervención de la USI
La Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud) explicó los motivos que llevaron a la intervención forzosa para administrar por un año a la Unidad de Salud de Ibagué E.S.E.
En un breve comunicado a la opinión pública, la entidad explicó que la decisión se tomó tras varios ciclos de auditorías y seguimientos, y ante la persistencia de graves deficiencias asistenciales, administrativas, jurídicas y financieras que ponen en riesgo la seguridad del paciente y la adecuada prestación del servicio de salud.
Entre los inmensos problemas de la USI están las reiteradas vulneraciones a las normas del Sistema General de Seguridad Social en Salud, fallas que no fueron subsanadas pese a los requerimientos, auditorías ordenadas y planes de mejoramiento aprobados por la Superintendencia.
Además, se argumentó que las visitas realizadas durante las vigencias 2023, 2024 y 2025 demostraron un deterioro progresivo en la operación institucional, afectando la oportunidad, continuidad, accesibilidad y seguridad de la atención en salud.
En consecuencia, la Supersalud adoptó las siguientes decisiones:
• La remoción inmediata de la gerente y de todos los miembros de la Junta Directiva.
• La designación de la doctora Edilma Isabel Hurtado Cardona como agente especial interventora, quien asume desde hoy las funciones de representante legal y administradora de la entidad.
• La ejecución de acciones inmediatas para garantizar la prestación segura y continua de los servicios de salud.
Por tal motivo, Edilma Isabel Hurtado Cardona, exsecretaria de Salud del Tolima, deberá presentar en un plazo máximo de treinta (30) días un plan de acción integral, orientado a superar, entre otras, las siguientes fallas identificadas:
• Restablecer la calidad y seguridad en la atención, especialmente en urgencias, consulta externa, farmacia, atención materno-infantil y manejo de desnutrición.
• Corregir fallas en prácticas seguras, fortaleciendo procedimientos de esterilización, gestión de eventos adversos, almacenamiento de medicamentos y control de inventarios.
• Garantizar talento humano suficiente y competente, así como el pago oportuno de salarios y prestaciones.
• Regularizar la información del REPS y eliminar barreras de acceso para los usuarios.
• Ejecutar el mantenimiento hospitalario obligatorio, asegurando infraestructura digna y segura.
• Recuperar la estabilidad financiera, mediante depuración contable, mejora en la facturación y control del gasto.
• Restablecer la gobernanza institucional, asegurando cumplimiento normativo y procesos de transparencia.
"Durante toda la intervención, la Superintendencia Nacional de Salud realizará monitoreo estricto al cumplimiento del plan de acción y de las órdenes impartidas, con el fin de restablecer la estabilidad institucional y garantizar la protección del derecho fundamental a la salud de la población de Ibagué y su área de influencia.
La Supersalud reitera su compromiso con la vigilancia y control del sistema de salud, la defensa de los usuarios y la protección de los recursos públicos", concluye la entidad en el comunicado.