James Cárdenas, residente del barrio Santofimio en Ibagué, hace un llamado a la comunidad y a las autoridades locales en busca de una oportunidad laboral que se ajuste a su condición médica. James padece albinismo, lo que limita su exposición directa al sol y a ciertas condiciones laborales que pueden afectar su salud de forma significativa.

Actualmente, Cárdenas sostiene a su familia vendiendo velas aromáticas y productos para el control de plagas, pero asegura que este trabajo no le proporciona los ingresos suficientes para cubrir las necesidades básicas de su hogar, especialmente teniendo en cuenta la situación de salud de sus seres queridos.

Vive con su madre, su esposa, sus dos hijos menores de edad y su suegra. Tanto su madre como su suegra padecen artrosis degenerativa, lo que requiere atención permanente, razón por la cual su esposa no puede salir a trabajar. “Mi prioridad es poder conseguir un empleo que no implique exposición al sol y donde pueda aportar económicamente sin poner en riesgo mi salud”, señaló.

James afirma que está dispuesto a trabajar en labores administrativas, de bodega, vigilancia en espacios cerrados u otros oficios compatibles con su condición. “No busco que me regalen nada, solo que me den una oportunidad para trabajar dignamente y mejorar la calidad de vida de mi familia”, añadió.

La historia de James refleja una realidad que enfrentan muchas personas con condiciones particulares de salud: la necesidad de inclusión laboral y de oportunidades que les permitan desarrollar sus capacidades sin poner en riesgo su bienestar físico.

Quienes deseen contactarlo o brindarle apoyo pueden hacerlo directamente a través de su comunidad en Santofimio o mediante redes sociales, donde su caso ha comenzado a circular con el fin de lograr una respuesta solidaria.