Residentes de la urbanización Los Lagos, ubicados en la calle 144 en el sector del Salado, denunciaron que desde hace aproximadamente un mes una caja de alcantarillado ubicada frente a la Casa Cural se está rebosando constantemente. Según la comunidad, las aguas residuales descienden por la pendiente y terminan acumulándose en la parte baja de la vía, generando serios problemas de salubridad.

Los vecinos afirman que los olores son insoportables y que esto ha generado problemas por la aparición de zancudos y otras afectaciones sanitarias. Incluso, señalaron que algunas personas del sector han manifestado síntomas relacionados con la exposición continua a las aguas residuales.

La denunciante manifestó que en las últimas horas, el IBAL desplazó un vehículo Vactor y adelantó una limpieza inicial en la red, pero la intervención no habría concluido. 

De acuerdo con la comunidad, los operarios informaron que necesitaban regresar después de tanquear el vehículo y que era necesario enviar un robot para inspeccionar la tubería, debido a que la vía no puede excavarse porque está bajo garantía tras una reciente pavimentación. Sin embargo, los funcionarios no habrían regresado.

Los habitantes explicaron que, una vez se detuvo el rebosamiento, varios vecinos tuvieron que lavar la calle por su cuenta utilizando hidrolavadoras, cloro y otros productos para retirar restos fecales que habían quedado adheridos al pavimento.

Por último, la comunidad del Salado solicita al IBAL retomar la intervención de manera urgente y terminar el trabajo pendiente para evitar que las aguas negras vuelvan a desbordarse, especialmente cuando vuelvan las lluvias, y continúen afectando la tranquilidad de quienes residen en esta zona de Ibagué.