Ibagué despertó este viernes 6 de agosto con varias restricciones que fueron decretadas ayer por el alcalde Andrés Fabián Hurtado con el fin de mantener el orden público y reducir la velocidad de los contagios de COVID-19.

Las autoridades locales nuevamente prohibieron el tránsito de motociclistas con acompañante hombre o mujer entre las 11 de la noche y las 5 de la mañana de cada día, pues al parecer de esa manera ha habido una reducción significativa de la actividad delictiva y los accidentes de tránsito.

Del mismo modo, continuará la exigencia obligatoria del 'pico y cédula' para ingresar a bancos, entidades financieras, empresas de servicios públicos y para realizar trámites presenciales en la Secretaría de Movilidad.

Los vehículos del transporte público colectivo deberán seguir operando máximo con el 70% de su capacidad. Es decir, únicamente podrán movilizar pasajeros sentados para evitar sanciones en medio de los operativos de los agentes 'azules'.

Consecuente con los horarios de funcionamiento para el comercio nocturno, el toque de queda en el casco urbano y la zona rural de Ibagué permanece entre semana de 1 a 5 de la mañana, y los días sábado y domingo de 3 a 5 de la mañana. Quienes violen la medida recibirán la multa correspondiente.