En el Día Mundial del Turismo, actividades sostenibles para dejar una huella positiva

Entre agosto de 2022 y junio de 2025, se ha realizado una inversión histórica de más de un billón doscientos mil pesos en 654 municipios, fortaleciendo el turismo como un motor clave de transformación social.
En 2024, el número de visitantes no residentes sobrepasó los 7 millones. En 2025, respecto a julio del año récord 2024, se registró un aumento del 6.8 % en la llegada de turistas, proyectándose hacia una nueva marca histórica.
En el primer trimestre de 2025, las divisas generadas por turismo sumaron US$2.865 millones, lo que representa un significativo aumento del 12.9 % frente al mismo periodo de 2024.
En Colombia se ha redefinido el turismo desde una visión del cuidado. Esta apuesta protege los ecosistemas, redistribuye el valor generado y pone a las comunidades como protagonistas. No se trata de un modelo extractivo, sino regenerativo: un turismo que construye paz dignifica los saberes locales y activa las memorias colectivas de nuestra nación.
Sosteniblidad
Según Civitatis hay formas de cumplir conos objetivos de llevar un turismo sostenible.
Pasaporte de impacto positivo: Más allá de acumular sellos en un pasaporte, la verdadera invitación es a dejar una huella positiva en cada destino. Los viajeros pueden sumar experiencias simbólicas y transformadoras: plantar un árbol, limpiar una playa o participar en actividades de turismo comunitario.
Viajar sin multitudes: Ir contra las multitudes también es un acto de responsabilidad. Apostar por temporadas bajas permite al viajero disfrutar de destinos con calma, aliviar la presión sobre los ecosistemas y abrir espacios de diálogo con la gente local. Se trata de recuperar el sentido de un “turismo slow”, donde la prisa no tiene cabida
Gastronomía regenerativa: Cada plato puede contar una historia de resiliencia ambiental. Al elegir experiencias culinarias que apoyen a productores agroecológicos, rescaten semillas nativas o restauren suelos, los turistas no solo degustan sabores auténticos, sino que también se convierten en inversionistas de la biodiversidad local.
Rutas invisibles: Más allá de las postales, existen lugares con historias únicas que rara vez aparecen en los folletos. Son recorridos que revelan oficios en riesgo de desaparecer, relatos de personajes que preservan la memoria cultural o comunidades que mantienen vivas leyendas locales.
Es válido visitar los sitios emblemáticos y llevarse un recuerdo fotográfico; sin embargo, la invitación es a ampliar el radar hacia esas rutas invisibles que, en muchos destinos, empiezan a tomar fuerza a nivel local aunque aún son poco conocidas por el turismo internacional e incluso nacional. Optar por estos caminos alternativos no solo abre la puerta a experiencias más auténticas, sino que también ayuda a diversificar la economía y a fortalecer la identidad de los territorios que los sostienen.
Souvenirs con alma local: Llevar un recuerdo de cada destino es casi un ritual de viaje, pero más allá de un objeto decorativo, un souvenir artesanal puede convertirse en una pieza cargada de historia y significado. Cada producto hecho a mano es el reflejo de una tradición, de un oficio que se resiste a desaparecer y de un creador que imprime en él parte de su identidad cultural.
Al elegir artículos elaborados localmente no sólo se apoya al comercio de la región, también se apuesta por una alternativa más sostenible frente a los productos industrializados, que suelen implicar mayores cadenas de transporte y consumo de recursos. Así, un souvenir deja de ser un simple recuerdo y se transforma en un gesto de conservación cultural y ambiental.
“Estas recomendaciones son una invitación a transformar la forma en que viajamos y a reconocer que cada decisión importa: desde la elección del hospedaje hasta el recuerdo que llevamos en la maleta. Apostar por experiencias sostenibles no solo enriquece al viajero, también fortalece a las comunidades y protege los ecosistemas que nos reciben. El verdadero turismo responsable se basa en el impacto positivo que dejamos en cada destino que visitamos”, concluye María Carolina Padilla, country manager Civitatis.