Pasar al contenido principal
Econoticias y Eventos
Opinión
COMPARTIR
Se ha copiado el vínculo

¿Se debe legalizar la marihuana?

Que se mantenga ilegal fortalece a los carteles de la droga, a todos los eslabones que la componen y a nuestro país le tocó la peor parte de la historia, ya que por desgracia, el mundo está perdiendo la batalla contra el narcotráfico y nosotros somos los que estamos poniendo los muertos. Por: José Adrián Moroy.
Imagen
Crédito
Suministrada
5 Nov 2020 - 12:29 COT por Ecos del Combeima

Hace un par de días fue archivado en la plenaria de la Cámara de Representantes, el proyecto de ley que pretendía modificar el artículo 49 de la Constitución Nacional para permitir el consumo de cannabis como sustancia que no genera afectaciones reales a la salud. La reforma establecía que el uso y el consumo serían solo para mayores de edad y en los lugares establecidos por ley; en esencia, lo que se buscaba es que quien consuma marihuana pueda ir a adquirirla a sitios previamente regulados para ello y que no ocurra como sucede hoy en día cuando estos consumidores deben ir a expendios ilegales. 

El tema en sí mismo despierta sensibilidad y por ende controversia, sin embargo, considero que el debate que se surtió en el congreso se desarrolló pensando en tomar una decisión que fuera popular y no fue motivada con argumentos sólidos y de fondo, por ejemplo: “Que la marihuana recreativa escala a otras drogas, afecta neuronas, que el consumidor llega a estados de alienación, o que se busca proteger a la juventud y la familia”; si esa es la razón o las razones, ¿qué pasa con el alcohol, si está demostrado que es más perjudicial para la salud, también genera adicción y es legal?, ¿ si se piensa en la familia, por qué no fortalecerla con educación para que los jóvenes tengan, criterio, principios, valores y no tomen malas decisiones?

La misma ponderación debería hacerse con el cigarrillo, todas las sustancias psicoactivas, el sexo, el juego o cualquier otra situación que en exceso genere dependencia. Entonces, el quid del asunto radica en evaluar,  que quienes tienen esa clase de adicciones son enfermos y como se trata de una enfermedad, el asunto debe ser manejado como un tema de salud pública. 

Ahora bien, las leyes nacen para solucionar problemas, conforme al principio de necesidad; la marihuana, en medio de todos nuestros males, no es el mayor ni el más grave, pues el narcotráfico, que si ha sido nuestro cancer, obtiene sus mayores ingresos por la producción y tráfico de cocaína y frente a eso no ha surgido una iniciativa que realmente lo corte de raíz. Adicionalmente, hay que recordar que en Colombia es permitida la dosis mínima, siendo así, ¿que sentido tiene prohibir la marihuana de uso recreativo?. 

Que se mantenga ilegal fortalece a los carteles de la droga,  a todos los eslabones que la componen y a nuestro país le tocó la peor parte de la historia, ya que por desgracia,  el mundo está perdiendo la batalla contra el narcotráfico y nosotros somos los que estamos poniendo los muertos. 

Álvaro Gómez decía hace 25 años, que ya era hora de buscar alternativas que  acabaran con el flagelo del narcotráfico, por cuanto nos había quedado grande combatirlo. 25 años después seguimos en la misma discusión, con los mismos inconvenientes y sin tener como resolverlos, parece que es algo que nos supera. Así que la discusión está abierta, toda vez que, no es una cuestión que se pueda plasmar en una sola columna y en unas pocas palabras; pero ya es hora que en el país, se plantee la forma de  cómo  vamos a librarnos de eso que nos tiene estancados, atorados y no nos deja evolucionar.

También te puede interesar estas columnas

El país no puede seguir indiferente ante esta realidad. No hay reforma más importante que la que hace real el futuro a quienes están hoy atrapados en la desesperanza. Porque si no les damos oportunidades, lo único que quedará es frustración y resentimiento.

Después de toda borrachera, llega el guayabo, y no solo el terciario, sino el de las malas acciones.

Durante los meses de junio y julio, el departamento del Tolima se convierte en un epicentro de tradición, identidad y dinamismo económico gracias a la fuerza de sus festividades folclóricas.

Al revisar las cifras, encontramos que Tolima es el segundo mayor productor de algodón en el país. De las cerca de 7.500 hectáreas sembradas anualmente en Colombia, aproximadamente 2.500 se cultivan en nuestro departamento. A pesar de los avances en semillas y tecnologías agrícolas, la productividad aún es baja.

No está lejos, toca seguir avanzando, y en esa mejora continua, llegar al ¨Top 10¨ de los departamentos más productivos y competitivos.

Ibagué y el Tolima entero viven por estos días una época de fiesta: música, tradiciones folclóricas y gastronomía atrapan a visitantes y locales.

¿De qué sirve inaugurar una obra millonaria si no funciona? Esa es la pregunta que muchos ibaguereños nos hacemos ante el fallido estreno del acueducto alterno, una mega obra que prometía liberarnos de los constantes cortes de agua y la dependencia exclusiva del río Combeima.

¡Lo volvió a hacer! El representante a la Cámara, Gerardo Yepes hace méritos para obtener el título de indisciplinado del año al interior del partido Conservador.

¿Cómo es posible que, a pesar de contar con presupuestos, políticas y documentos que advierten sobre la importancia de tomar medidas, aún no tengamos campañas bien estructuradas para reducir el consumo de agua?

Hemos sido engañados, por altos estamentos nacionales quienes desconocen y pretenden minimizar las grandes falencias de este “antisistema de salud” fundamentado sobre la intermediación financiera.