En un acto de rechazo colectivo, padres de familia del Hogar Comunitario sede Topacio, en la ciudad de Ibagué, se reunieron de manera urgente para manifestar su inconformidad frente a la suspensión de las actividades del jardín y el retiro del personal docente a cargo.

La medida, según los acudientes, fue tomada por las autoridades a raíz de la denuncia de una sola persona, a quien acusan de actuar con “evidente mala intención” y motivaciones personales. Los padres califican la decisión como “injusta y desproporcionada”, alegando que pone en riesgo la estabilidad emocional de los menores y afecta directamente el bienestar de los niños y la integridad de las docentes.

Durante la reunión, los padres expresaron su respaldo absoluto al equipo docente, asegurando que en todo momento han percibido un trato respetuoso, afectivo y profesional hacia los niños. "Nunca hemos evidenciado señales de maltrato o comportamientos inapropiados", afirmaron.

Además, señalaron que la sustitución de las profesoras por personal desconocido genera confusión y ansiedad entre los menores, quienes, al ser de corta edad, requieren estabilidad y vínculos emocionales seguros para su adecuado desarrollo.

Los padres hicieron un llamado a las autoridades competentes para que se reconsidere la decisión y se permita el regreso del equipo docente original. “Confiamos plenamente en las profesoras actuales y damos fe de su calidad humana y profesional”, manifestaron en una declaración conjunta.

La comunidad educativa espera que las voces de las familias sean escuchadas y que se priorice el interés superior de los niños ante cualquier medida administrativa. Sin embargo, hasta el momento el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) regional Tolima, encargado del manejo de estos hogares comunitarios, no se ha pronunciado sobre la situación.

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